viernes, 5 de agosto de 2016

Oblivion

Tom Cruise parece haber encontrado un filón últimamente en el cine de ciencia ficción: Minority report, Al filo de mañana y esta Oblivion parecen indicarlo. No está mal, después de sus fases de ídolo juvenil, sex-symbol, héroe de acción y siempre, siempre, cienciólogo practicante. 

En esta ocasión Jack Harper (Tom Cruise) es un técnico de reparación en un planeta Tierra casi desolado por una guerra que la ha dejado prácticamente inhabitable. La Humanidad, o más bien sus restos, han tenido que mudarse y han dejado atrás a un pequeño grupo de especialistas que velan porque las máquinas que "recolectan" los recursos naturales continúen funcionado. 

Tom Cruise, con cara de intenso

Por lo que se ve, estos equipos repartidos por el mundo están formados por parejas. En el caso de Cruise, tiene una compañera (Victoria) que monitoriza sus movimientos y comunica con la central. Así van pasando los días, a la espera de que llegue el ansiado relevo y puedan irse a Titán, el nuevo hogar de la Humanidad (o lo que queda de ella). Incluso Jack Harper encuentra un lugar fuera del alcance de ese Gran Hermano que es el control de misiones, un lugar en el que guarda cosas que le recuerdan a un pasado más feliz, antes de la guerra.

Todo cambia cuando una nave se estrella y Jack Harper rescata a una mujer con vida. Una mujer que, cosa extraña, es protagonista de sus sueños desde hace tiempo. Vamos, que algo huele a podrido al sur de Dinamarca. 

Un ático con vistas

 Más cuando resulta que hay un grupo, los carroñeros, que intentan sabotear la "recolección". En un principio se da a entender que son restos del contingente extraterrestre que han quedado atrapados en la Tierra, pero luego resultan ser mucho más...

La cosa se complica luego con un juego de clones. Aquí es cuando uno ya empieza a sospechar que la cosa tiene gato encerrado, lo que se va confirmando en un final bastante previsible (excepto el último punto del plan de Jack que, sencillamente, no vi llegar). 

Se diría que es coprotagonista, pero no...


La película es demasiado larga y bastante liosa. Echa a perder un inicio prometedor con vueltas y vueltas argumentales que no hacen nada por cambiar un rumbo que ya a media película está bastante claro. 

Y no entiendo lo de meter a Morgan Freeman y a Jaime Lannister para aparecer entre los dos algo así como diez minutejos. Supongo que se lo llevarán tieso, pero para el espectador es un poco fraude.

Un aprobado, sin más...

"¿Es posible añorar un lugar donde nunca se ha estado?. ¿Llorar por una época que nunca se ha conocido?" - Comandante Jack Harper


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